El fiscal David Carizza de la Agencia de Criminalidad Organizada y Delitos Complejos imputó este jueves a cuatro hombres por usura crediticia. Según detalló durante la audiencia, los imputados hacían préstamos a devolver en cuotas diarias con una tasa de interés usuraria. Cuando las víctimas no podían pagar, volvían a financiar la deuda bajo amenaza de quemarles la casa.

De acuerdo al fiscal, además de los cuatro imputados, de origen colombiano, hay otras personas aún no individualizadas que formaban parte de esta organización que comenzó a operar en marzo del 2020 y que se aprovechaba del apremio económico de muchos comerciantes para comenzar con la usura.

La causa se inició por la denuncia de una comerciante de Gorriti al 5700 a la que uno de los imputados, identificado como A. F. L. G. le ofreció un préstamo de 50 mil pesos a devolver en 36 cuotas diarias de 2.800, lo que representa una tasa de interés del 2,82 por ciento diario. La mujer logró devolver 34 cuotas y quedó una deuda de 5.600 pesos.

Ante esa situación, A. F. L. G. amenazó a la víctima y le ofreció refinanciar esa deuda con un pago diario de 4.260 pesos por día, lo que elevó la deuda de la mujer a más de 200 mil pesos. Ante las dificultades para poder cumplir ese compromiso, la mujer recibió la visita de A. G. F. G, el padre del prestamista anterior y le ofreció un crédito de 50 mil pesos a pagar en 36 cuotas de 2.800 por día.

Al poco tiempo, la comerciante volvió a encontrarse imposibilitada de pagar las sumas diarias y el segundo prestamista, le sugirió que tomase un crédito de C. C. P. H., que tamnbién fue imputado en esta causa. Este nuevo personaje le dio una suma de 40 mil pesos a devolver en 30 cuotas de 2.200 por día.

Ante esto, la víctima comenzó a tener que hacer pagos diarios de $4.260 a uno, $2.800 a otro y $2.200 al tercero, lo que volvió a ponerla en el apuro de no poder cumplir con sus obligaciones y recibió otro crédito de 50 mil pesos a pagar en 36 cuotas diarias, lo que elevó su pago diario a la organización a $11.460.

La situación se repitió en otra oportunidad, en esta caso la mujer recibió otro préstamo de 60 mil pesos, que debía utilizar para devolverle el dinero a los mismos que le estaban prestando.

En diciembre de 2020, los usureros le refinanciaron la deuda de 450 mil pesos de los cuales pudo devolver 319 mil. Ante la imposibilidad de seguir pagando y la negativa de tomar un nuevo préstamo, la mujer fue amenazada por uno de los prestamistas con que le iban a quemar la casa.

Tras escuchar el relato del fiscal y analizado las pruebas presentadas, el juez de Primera Instancia, Ismael Manfrin aceptó la imputación por los delitos de usura crediticia agravada por habitualidad o profesionalismo, para todos los acusados y dictó la prisión preventiva efectiva por el plazo de 60 días.