Una banda ligada a Los Monos planificaba atentar contra el casino City Center de Rosario con la finalidad de extorsionar a sus autoridades. Tres días antes, los dos miembros de la organización que iban a realizar el ataque cayeron en un operativo de Gendarmería por la tenencia ilegítima de un arma. El cabecilla de esa banda le pidió a otro integrante que "gestionara" las dos libertades. Quien recibió la orden primero se contactó con un jefe policial retirado y luego con personal judicial para consultar la situación de los aprehendidos. Ese funcionario se sospecha que es el fiscal Gustavo Ponce Asahad, y este viernes fue allanado en Rosario, en bulevar Oroño 1217, por estar investigado por corrupción.

Los dos detenidos que iban a cometer el atentado contra el City Center se llaman Claudio Ricaldez y Hernán Horacio Quinteros, actualmente prófugos en la causa por extorsiones y juego clandestino. Quien pidió que se gestionara su libertad es Maximiliano "Cachete" Díaz y quien recibió la orden es Leonardo Andrés Peiti, quien es imputado este mismo viernes tras permanecer prófugo varios días.

Detuvieron al fiscal Ponce Asahad por vinculación con banda criminal

De acuerdo a la investigación, Peiti primero se comunicó con Alejandro Torrisi, jefe policial retirado. Luego lo hizo con personal del Poder Judicial. Posteriormente, Peiti le mostró a Díaz una captura de pantalla de un diálogo por Whatsapp que mantuvo con personal del MPA.

"Y Hernán Horacio Quinteros. En esta se comió un encubrimiento por andar con un auto robado y tenía una 9mm cargada, le metieron portación de guerra. Fue ayer, por protocolo tenía que pedir prisión preventiva, pero aparentemente se puede cerrar después de peritar el arma. No tengo la causa yo, pero dejame ver cómo metemos un comentario ahí. En un mes le podrían dar la libertad. No tiene antecedentes, así que seguramente", es el mensaje que expone Peiti que le respondió alguien de la Justicia local.

Por esa situación fue allanado el fiscal Gustavo Ponce Asahad, a quien se le secuestró material de interés para la causa. También a su colaborador Nelson Ugolini, a quien se le incautó su teléfono.