—Hola amigo taxista. Gracias, pero hoy no necesito que me lleve. Solo lo llamé para darle este escrito donde resumo mis humildes pensamientos con motivo de recordarse a la mujer el próximo 8 de marzo. Hasta pronto. 

MUJER

Poco a poco, como se evaporan las gotitas del rocío, vas ganando lugar en l. sociedad que integras. Esa sociedad que por siglos te usó, ignoró tus derechos, desconoció tus decisiones. El repaso de tu historia en la humanidad, pone en evidencia lo. cambios mundiales que se están encausando y muchos de los cuales ya se disfrutan. Por lo cual, aquello que fue contigo, hoy ya no es igual. Ello te posiciona sin dudas, frente a una libertad desconocida que un poco desconcierta y otro poco asusta. De cara a ella, como mujer madura, te invito a reflexionar. y pregunto: ¿Cómo disfrutar esa libertad, sin rencores, sin revanchas, sin agredir al que por siglos a sabiendas o no, fue el opresor? ¿Cómo tomar decisiones sensatas que no las motive un pasado de interpretaciones equívocas, soportando hegemonías como si fueran naturales? Es extraño. Quizás sean los años los que facilitan la respuesta. Mujer de todas las edades, no tendremos libertad plena jamás, si continuamos inmersas en la ignorancia.

Este es el momento de crecer, de instruirnos, de pensar. De tomar decisiones apoyándonos en la base indiscutible de la educación, verdadero pilar de una evolución auténtica. Soy consciente de que uno de los temas que más se viven en este cambio mundial, es la sexualidad. De frente a ella te digo que la falta de sano posicionamiento en nuestro país en general, aterra. Por ejemplo: No es despenalizar el aborto lo primero que debemos exigir. Sino que nos quiten el telón de la ignorancia brindándonos en todas las edades la Educación Sexual que corresponde, íntegra, total, respetable, además de los medios necesarios para evitar en las mujeres en edad fértil, el embarazo no deseado. Si lo logramos serán cada vez más escasas las veces que se deba recurrir a interrumpir una vida, incluso arriesgando la propia. Piensa. Ahora que puedes, infórmate, edúcate y resuelve. A solas. Sin modelos, ni condicionamientos. ¿Qué prefieres? ¿Evitar el embarazo no deseado, o aborta. porque nadie te penaliza?

Años y años transité junto a mujeres que tenían hijos para complacer a su hombre, para intentar retenerlo, para conseguir algo propio, o simplemente porque no sabían decir que no. Y luego observé su lucha en la soledad de su crianza. Porque los sucesivos gobiernos tampoco estuvieron junto a ellas. Y esto es solo un ejemplo. Hay tantos, tantos más que no voy a enumerar porque tú los conoces muy bien. Exige mujer. Edúcate. Es la era en la que se puede intentar resolver en libertad tu lugar en la sociedad, tu trabajo, si quieres casarte o no, si quieres tener hijos o no, si quieres estar a la par del hombre sin rencores ni revanchas, si quieres terminar con la violencia de género. No te dejes llevar por modelos confusos o la moda del momento. Abortar no debe ser tu meta. Solo debe ser un recurso inevitable.

Pero ¿qué digo? Te estoy dando un modelo a seguir. Perdón. No quise. Elije el tuyo, con educación, con información con criterio propio. Debe llegar el día en que el 8 de marzo sea solo el recuerdo de un pasado perimido, superado, porque habrá triunfado la Educación, madre de todas las auténticas evoluciones del ser humano. Entonces sí, mujer, por fin, tú, y todas, seremos libres.