El frío y los días libres suelen ser la combinación perfecta para que las pantallas ganen protagonismo en casa. Tablets, consolas y celulares se convierten en los mejores aliados del entretenimiento, pero también en un problema cuando ocupan demasiado espacio en la rutina.
Estas vacaciones de invierno son una gran oportunidad para ayudar a los chicos a equilibrar su tiempo, alejarlos un rato de las pantallas y proponerles otras alternativas que los mantengan activos, curiosos y conectados con el mundo real.
-Proponer salidas, aunque sean cortas: No hace falta planear grandes excursiones, ya que una caminata por la plaza, una tarde en la biblioteca o una visita a una feria local ya pueden ser suficientes para cortar con la rutina de pantallas. Salir de casa y cambiar de ambiente ayuda a que los chicos se distraigan y se conecten con el entorno.

-Averiguar por actividades dirigidas a niños: En estas vacaciones, la ciudad cuenta con un sinfín de propuestas y muchas de ellas son gratuitas. Disponerse a averiguar en perfiles de redes sociales o páginas web dará como resultado el hallazgo de varias actividades para realizar en estos días de receso invernal.
-Juegos de mesa y actividades en familia: Los clásicos juegos de mesa nunca fallan. Además de ser entretenidos, fortalecen el vínculo familiar y permiten que los chicos pasen tiempo de calidad sin depender de un dispositivo. También se pueden sumar actividades como cocinar juntos, hacer manualidades o armar rompecabezas.

-Fomentar hobbies creativos: Las vacaciones son el momento ideal para descubrir nuevos intereses. Dibujo, lectura, música o incluso jardinería pueden convertirse en grandes aliados para alejarse de las pantallas. Es clave acompañarlos y darles el espacio para que puedan explorar sin presión.
-Armar espacios “libres de pantallas”: Establecer zonas de la casa donde no se usen dispositivos, como el comedor o la habitación, ayuda a que los chicos puedan desconectarse de a poco. También se pueden proponer horarios específicos para jugar con el celular o mirar televisión, sin que eso ocupe todo el día.
-Incentivar el juego al aire libre: A pesar del frío, el movimiento es necesario. Organizar juegos al aire libre o invitar a otros niños a la plaza puede ser un plan divertido y saludable. Incluso, los días fríos pueden volverse más atractivos con una buena merienda caliente al regresar a casa.
