Aún sin una lluvia intensa, que se esperaba (deseaba) para este viernes a la noche o sábado a la madrugada, el viento fresco que se desató sobre la ciudad a la tardecita hizo bajar la sensación térmica 16 grados en pocos minutos.

El Servicio Meterológico Nacional (SMN) informó un pico de calor para Rosario a las 15: una temperatura de 38 grados y una sensación térmica de 44,5°.

Una hora después, la temperatura subió a 38,1 grados pero no se informó sensación (porque la humedad bajó del 41% al 36%). En ambos registros se superó la máxima anuncidad que era de 37.

A las 19, el calor todavía no mermaba: 36,9 grados y una térmica de 42°. Pero a partir de esa hora el cielo se nubló desde el sur y al poco tiempo se desataron ráfagas intensas sobre la ciudad. 

A las 20, unos minutos después de ese viento que hizo caer árboles y ramas en distintos puntos de la ciudad, el SMN midió apenas 26,9° grados y una térmica de 26. Y en lugar del viento cálido del norte, había uno sur a 38 kilómetros por hora.

El pronóstico indicaba "tormentas fuertes" para lo que queda de la jornada y el sábado a la madrugada.