El tenis tiene cita en la ciudad desde hace algunos días. El Challenger de Rosario alberga a algunos de los mejores tenistas del país y a algunas estrellas internacionales, entre la que se destaca Diego Schwartzman, ex número 8 del mundo, que espera su debut.
El Peque ofreció una conferencia de prensa el lunes pasado, porque el martes se daría su presentación ante el argentino Camilo Ugo Carabelli, pero la lluvia de las últimas horas hizo que se postergaran algunos juegos. Uno de ellos fue el suyo.
��️ @dieschwartzman, a sala llena en la conferencia de prensa previa a su debut en el YPF Rosario Challenger.
— Rosario Challenger (@rosariochall) February 3, 2025
��️ "Este torneo tiene un clima muy lindo. Trataré de hacer lo mejor que pueda para la gente y para mí. Ganar o perder partidos no es un objetivo, sino dar un espectáculo… pic.twitter.com/9Zx2SmaGY6
Schwartzman incluso había estado haciendo trabajos de calentamiento este martes esperando poder salir a escena en Rosario, pero no pudo.
Al finalizar la jornada, la organización del certamen reprogramó ese duelo entre compatriotas para este miércoles en segundo turno, cerca de las 15.30, en la cancha central del Jockey Club. Sin embargo, la impiadosa tormenta hizo que otra vez la jornada tenística se viera suspendida.
��Atención: ¡el partido de Diego y Camilo se juega mañana!
— Rosario Challenger (@rosariochall) February 5, 2025
⛈ Segun el reglamento de ATP y por las condiciones climáticas que tuvimos hoy, el partido entre Diego Schwartzman y Camilo Ugo Carabelli fue reprogramado para el segundo turno de las 14 de este miércoles.
❤��Como… pic.twitter.com/uCnDD2tfuB
Entre risas, pero un poco contrariado, el Peque decidió pasar sus horas en las redes sociales y escribió: "Parece que el clima no quiere que me jubile che…"
Parece que el clima no quiere que me jubile che… ��⛈️☔️
— diego schwartzman (@dieschwartzman) February 5, 2025
Si bien todavía la organización del evento no confirmó cómo ni cuándo seguirá la actividad, es muy probable que este miércoles nadie pueda pisar el polvo de ladrillo.