La economía argentina navega entre tensiones políticas, dólar presionado y expectativas que empiezan a desgastarse. Mientras el Gobierno de Javier Milei apuesta a que "todo siga pasando" para que el plan económico funcione, los gobernadores de distintas provincias, incluyendo Santa Fe, agotan los canales institucionales y evalúan elevar la pulseada con la Casa Rosada por la falta de recursos y transferencias que siguen congeladas o ausentes.

A esto se suma el condimento electoral. Hoy en Santa Fe se elegirán 19 intendentes, y concejales en todas las ciudades, y tanto el oficialismo local como la Casa Rosada siguen con atención el resultado. La elección es vista como un termómetro del clima político, fundamentalmente en Rosario, pero también en el resto de las localidades, en un momento donde la tensión Nación-provincias escala y donde cada voto empieza a cotizar en dólares.

Y hablando de dólares: el tipo de cambio dejó de apreciarse. La pax cambiaria, sostenida con intervención en los futuros, comienza a mostrar señales de agotamiento. Según analistas, se viene un segundo semestre con mayor presión sobre el dólar, con inversores más cautelosos y un clima de negocios que, aunque no colapsa, se vuelve más áspero.

El contraste con el exterior no podría ser más marcado. Mientras afuera el humor de los mercados mejora, en Argentina crece el clima electoral que tensiona. Las señales de distensión global —como la reactivación comercial entre EE.UU. y China, el preacuerdo entre Donald Trump e India y un nuevo giro aperturista desde el Reino Unido— provocaron un cierre de semana positiva en los principales índices internacionales.

Incluso el consumidor estadounidense recuperó confianza, alentado por mejores expectativas inflacionarias. Y la OPEP+ evalúa aumentar la producción de petróleo, otro indicio de reactivación del comercio global. Sin embargo, todo ese aire fresco no cruza la cordillera: el mercado argentino sigue bastante inmóvil, sin volumen, ni atractivo para los capitales, ni voluntad de riesgo entre los inversores institucionales.

Del lado productivo, en el campo cayó mal la vuelta de las retenciones a los niveles previos de la rebaja temporal para la soja y maíz. Desde el gobierno no habían dado ninguna señal en ese sentido. Sí para el trigo. El campo pide señales más contundentes. La rentabilidad sigue ajustada y las señales como la apertura para la importación de maquinaria usada y otras flexibilizaciones en insumos no son suficientes para el ánimo del productor.

En paralelo, en Rosario también se gestan también algunas de las innovaciones más radicales del sistema financiero argentino. Las fintech rurales, nacidas del ADN agropecuario, ahora sueñan con un “Nasdaq versión Rosario”, un espacio para tokenizar activos del campo y canalizar inversiones en forma ágil, digital y sin intermediarios tradicionales. 

En simultáneo, el cripto ecosistema sigue ganando terreno: bancos, exchanges, billeteras digitales y hasta productores agropecuarios empiezan a hablar un mismo idioma. Las fronteras entre finanzas tradicionales y descentralizadas se diluyen rápidamente. 

Todo esto se pudo ver y escuchar esta semana en el Meetups Fintech que organizó la Cámara Argentina Fintech y que hizo desbordar el recinto de operaciones de la Bolsa de Comercio de Rosario de empresarios y ejecutivos del sector de la talla de Binance, Ripio, Coinag, de los tres mercados financieros (A3, MAV y Byma) y de la CNV, entre otros, junto con pymes de la región que impulsan este ecosistema muy dinámico.

Por ejemplo, una fintech, Win Investments , presentó como producto la tokenización de los derechos de formación de futbolistas y permite que cualquier persona en el mundo invierta en el próximo pase de estrellas. Así, desde asado al mercado de pases: Messi, McAllister y 200 cracks por $1.200 en tu billetera virtual. 

Desde la Bolsa de Comercio de Rosario ven este en este sector “aires nuevos” que de a poco se van sumando, y así lo quieren hacer también, a la vida institucional de la entidad.

En el plano regulatorio, la Comisión Nacional de Valores (CNV), a través de su presidente Roberto Silva, aseguró que su acelera su agenda: luego de una serie de medidas de estabilización financiera, se esperan cambios que podrían impactar fuerte en el ecosistema fintech, las billeteras digitales y los mecanismos de inversión. 

“Estamos al borde de una nueva fase regulatoria, más quirúrgica”, adelantó.

Un evento en el que se habló también mucho del sector tecnológico. Globant, uno de los unicornios argentinos, enfrenta cuestionamientos internos, cambios estratégicos y presión externa por la regulación de la inteligencia artificial. Todo mientras redefine su plan de negocios y lanza nuevas unidades para sobrevivir a un mundo tech cada vez más competitivo.

Mientras tanto, el consumo también se transforma. Las billeteras como MODO, que reúnen a los bancos, apuestan a segmentar al extremo sus beneficios: descuentos quirúrgicos, pagos en dólares y estrategias con IA para ganarse a un cliente que ya no compra por reflejo. Así lo planteó su CEO, Rafael Soto, después de reunirse con empresarios de distintos rubros en Rosario en un desayuno con periodistas en el 5 piso del Hotel Puerto Norte.

Pero no todo es tensión. En Rosario, desde el próximo martes 1° de julio arranca la Feria Internacional de la Alimentación (FIAR 2025), con más de 250 expositores, stands de doble altura, tecnología de última generación en frío y calor, y un objetivo claro: generar negocio real en un contexto incierto. Con degustaciones premium, maquinaria de exportación y marcas líderes, la feria apuesta a ser mucho más que un evento: un salvavidas para la industria alimentaria regional.

En la muestra seguramente habrá novedades en materia de líneas de créditos, así como en paralelo se presentará la propuesta para consumidor final para la compra en corralones, como ya realizó la provincia en convenio con bancos y el rubro neumáticos.

Todo esto, mientras el debate político, judicial y tributario sigue al rojo vivo. Desde la posible inconstitucionalidad del impuesto PAIS hasta la redefinición del rol del empresario en el nuevo régimen económico, las tensiones se acumulan. Y lo que antes era expectativa, ahora empieza a ser exigencia.