Todavía en Rosario y a poco de viajar hacia Córdoba para otro cierre de campaña, el precandidato presidencial Alberto Fernández, habló con Radio 2 del acto del masivo acto de este miércoles en el Monumento Nacional a la Bandera, de sus diferencias con el actual presidente Mauricio Macri, de su relación con el gobernador electo Omar Perotti y de cuáles son las necesidades urgentes de Santa Fe.

“Con Omar (Perotti) tengo una comunidad de ideas y una misma visión de la Argentina que hace falta. Me siento absolutamente cómodo”, aseguró Fernández en contacto con el programa A diario. En tal sentido, señaló tres puntos que a Perotti le preocupan y sobre los que él espera avanzar en caso de ser electo presidente: la hidrovía, cuya concesión perjudica a las provincias que lo usan y que vence el año que viene; el tendido vial del norte santafesino, o mejor dicho, la fatal de obras viales; y el altísimo precio de la energía eléctrica.

El mayor problema de la Argentina es que se ha desarrollado con una lógica de concentración en Buenos Aires en desmedro del resto y eso no puede seguir operando”, repitió el precandidato uno de los conceptos que este miércoles desarrolló arriba de un escenario lleno de representantes de todas las provincias, una alquimia hasta entonces impensada para el justicialismo nacional. Agregó que se imagina siendo presidente con 24 gobernadores (incluyendo a la jefatura de la Ciudad Autónoma).

En tanto sobre Macri, reiteró también sus críticas y destacó su propio recorrido en política: “El presidente ha demostrado sus enormes dificultades para resolver el problema de los argentinos y creo que eso tiene que ver con que nunca se dedicó a esto. Se dedicó a las empresas, al fútbol pero nunca a esto. Y eso se nota. No conoce los resortes centrales del Estado, en gran medida los problemas que pasamos, tienen que ver con eso”.

Consultado sobre cómo convencería a un votante indeciso y qué tanto pesa su pasado kirchnerista y antikirchnerista, Fernández fue contundente: “Quiero ser mejor de lo que fui”.

El único candidato que dice quiero volver para ser mejor, revisando errores. El otro dice quiero hacer lo mismo pero más rápido. Entonces, ¿cuál es la mirada crítica que tiene el gobierno sobre sí mismo?”, disparó.

Uno no propone la restauración de un régimen o sistema, propone la construcción de algo diferente y por eso insisto en que nos animemos porque el futuro nunca tiene que ver con el pasado”, insistió.

Sobre el rol de Cristina Fernández en su posible nuevo gobierno, sostuvo que primará la amistad: “La política hizo que nos distanciemos y también que nos reencontremos, tengo a una vicepresidenta que es mi amiga antes que nada. Yo celebro que con su experiencia y poder político me respalde y me ayude a gobernar porque además hay una comunidad de concepción política y de afectos que no me parece menor”. Y aclaró que si hubiera pensando que no iban a ser capaces de trabajar juntos, nunca hubiera aceptado encabezar la fórmula presidencial, al igual que en su momento, decidió irse de la jefatura de Gabinete.