La concejal del bloque Socialista, Verónica Irizar, solicitó datos oficiales sobre los suicidios ocurridos entr. 2023 y 2025 en la ciudad de Rosario, con el objetivo de fortalecer las políticas públicas en salud mental. La información pedida incluye datos estadísticos según edad, sexo, residencia y otros indicadores clave. Además, busca conocer las estrategias implementadas tras la aprobación de la Ordenanza 10.707 para la prevención, atención y seguimiento de casos, así como el registro de instituciones que trabajan en la temática.
Conjuntamente, pidió detalles sobre los dispositivos de asistencia para familiares y allegados de víctimas, con información sobre su demanda y evolución histórica. Una vez recolectados los datos se busca obtener un diagnóstico para optimizar las respuestas y estrategias. “El suicidio debe entenderse como un problema de salud pública, que debe priorizarse en las agendas gubernamentales por su magnitud, su impacto, su evitabilidad y por las posibles barreras de acceso al derecho a la salud y las brechas que pueden surgir en el proceso de atención. Es una manifestación de las problemáticas de las violencias en las grandes ciudades”, subrayó la edila.
En función de la complejidad del fenómeno del suicidio, se busca avanzar en la identificación y el análisis de las conexiones y asociaciones entre la violencia autoinfligida y otras violencias, en sus distintas manifestaciones. En la misma línea, Irizar resaltó que “en los últimos años hubo un aumento sostenido de la demanda hacia los servicios de salud mental, que se refleja en mayores consultas por consumos problemáticos (de sustancias y de tecnología), trastornos de ansiedad de distinto tipo, depresión, intentos de suicidio, crisis de tipo psicótica”.
“No se puede desconocer la responsabilidad del Estado, ya sea por situaciones en las que no se garantizan los derechos humanos básicos, o situaciones de violencia institucional ejercida por agencias estatales, y actualmente, en particular por los discursos de violencia y odio imperantes y reforzados por diferentes expresiones y decisiones del presidente de la Nación. Esto produce una creciente naturalización de los discursos violentos, hiper-individualistas, competitivos, de idealización del dinero y de ataque a los consensos democráticos alcanzados por la sociedad”, subrayó la concejala socialista.
Por último, destacó que “la Municipalidad de Rosario siempre fue pionera en salud pública, partiendo de un modelo de abordaje comunitario que entiende que los procesos de salud, enfermedad, atención y cuidado se producen en el ámbito territorial, en tanto, el despliegue y fortalecimiento de las redes locales debe ser una de las prioridades en materia de políticas públicas”.
Pandemia, redes sociales y nuevas tecnologías
Expertos señalan que el incremento de las problemáticas de salud mental no puede analizarse sin tener en consideración algunos factores del orden de los niveles comunitarios y sociales: los impactos que tuvo la pandemia de covid-19, las redes sociales y las nuevas Tecnologías de la Comunicación (TIC’s), en un contexto de exacerbación del individualismo.
“En una sociedad que parece desintegrarse en el individualismo y un reconocimiento en la agenda pública de la problemática del suicido como algo de lo que se puede y debe hablar como fenómeno multicausal, el Gobierno Nacional con su desmantelamiento del Estado actualiza en la práctica definiciones que se desentienden de sus responsabilidades y consecuencias. En términos de salud mental, implica un retroceso de paradigma”, explicó Irizar.
“El achicamiento y corrimiento del Estado, el aumento del desempleo y la pérdida del poder adquisitivo de las mayorías, alejan toda posibilidad de concreción de los derechos humanos y sociales que son inherentes a la salud mental. Es una deuda histórica en todo el país”, agregó.
Irizar aseguró que “en momentos en que los últimos indicadores oficiales muestran un incremento en los casos de suicidio, siendo la principal causa de muerte en jóvenes de entre 15 y 29 años, el gobierno nacional realizó un recorte de más de $1.270 millones para el presupuesto vigente 2025 en el Programa Prevención y Tratamiento de Patologías Específicas que tiene, entre las funciones asignadas, desarrollar acciones para la Promoción y Apoyo de la Salud Mental”. Si a esto le sumamos los recortes en el presupuesto de los Hospitales Ramón Carrillo y Laura Bonaparte, más el recorte de fondos al SEDRONAR, el ajuste en partidas vinculadas a políticas de salud mental es de aproximadamente $ 26.500 millones.
“Este recorte es especialmente preocupante dada la situación del 2024 y la proyectada para el 2025 ya que se continúa con una prórroga de la ley de Presupuesto del 2023 por decisión del Ejecutivo Nacional. Con altos niveles de inflación, las partidas quedan completamente desactualizadas y su inversión para atacar la problemática es totalmente insuficiente”, completó.
Según datos oficiales de la Dirección de Estadísticas e Información de Salud del Ministerio de Salud de la Nación (DEIS), entre el 2012 y el 2022 se registró un promedio de 3175 muertes por suicidio al año, ascendiendo a 3.488 en el 2023, de los cuales más del 50% corresponden a adolescentes y jóvenes adultos de hasta 34 años, tratándose de la principal causa de muerte de personas de entre 15 y 29 años, por encima de los siniestros viales.