La misión china Chang'e 6 logró un avance importante en la comprensión de la Luna, al traer muestras del lado oculto de la Luna que contienen un registro de vulcanismo antiguo, magnetismo y un manto empobrecido en elementos importantes y agua. La cuenca del Polo Sur-Aitken (SPA) es el mayor sitio de impacto lunar y se cree que su formación tuvo un impacto significativo en la geología lunar y la evolución térmica del interior lunar.

Los resultados de Chang'e 6 se presentaron en cuatro artículos que se publicaron en la revista Nature y ofrecen una nueva perspectiva sobre la geología y la evolución térmica del interior lunar. Basados en los estudios, los científicos anunciaron cuatro descubrimientos importantes. Primero, las muestras contienen rocas volcánicas llamadas basaltos que datan de erupciones volcánicas prolongadas en el lado oculto de la Luna en dos fases distintas, una hace unos 4.200 millones de años y otra hace 2.800 millones de años.

Segundo, el análisis geoquímico de las muestras de basalto apunta a una fuente en el manto lunar, a gran profundidad, con un alto nivel de escasez de elementos específicos como el torio. Tercero, las muestras contienen agua, aunque en cantidades muy pequeñas, lo que sugiere que el manto de la cara oculta de la Luna está aún más seco que el de la cara visible.

Cuarto, las muestras conservan un registro del campo magnético de la Luna, que muestra que el campo magnético recuperó su intensidad hace unos 2.800 millones de años, lo que indica que la dinamo interna de la Luna fluctuó de forma episódica.

Estos descubrimientos tienen implicaciones importantes para la comprensión de la evolución de la Luna y de otros cuerpos celestes. La creación de la cuenca SPA puede haber desempeñado un papel importante en la evolución del interior de la Luna, y es posible que se haya subestimado el papel que estos impactos gigantes desempeñaron en la evolución de los planetas, según los expertos.