Marcelo Sain dirige desde hace 8 meses el Organismo de Investigaciones (OI), dependiente del Ministerio Público de la Acusación (MPA), cuyo objetivo es asistir a los fiscales en materia de criminalidad compleja. Licenciado en Ciencias Políticas y Doctor en Ciencias Sociales, el funcionario consideró que la organización criminal se ha modificado y que cuenta necesariamente con la connivencia estatal y con el sistema económico formal como último eslabón de la cadena. Criticó la forma en que se viene investigando a las organizaciones delictivas, habló de un Estado que mira al costado y que está en deuda con los ciudadanos. Consideró que se ha hecho de Los Monos una “marca registrada” al tiempo que cuestionó el retraso judicial en abordar la actuación de Esteban Alvarado. El también docente e investigador de la Universidad Nacional de Quilmes brindó una entrevista a Mesa de Diálogo, el espacio de encuentro de Rosario3, que será publicada el martes 6 de agosto próximo. Acá, un adelanto de los momentos más relevantes.

Consultado acerca del escenario con el que se encontró a su llegada a Santa Fe – desde la provincia de Buenos Aires, donde también fue funcionario y legislador–, describió: “Se consume tres o cuatro veces más que hace 15 años atrás con lo cual las redes que abastecen ese mercado son cada vez más sofisticadas. Tienen un entrecruzamiento con dos cuestiones muy sensibles para ser objeto de una investigación criminal que es la protección de sectores del Estado, fundamentalmente estructuras policiales pero también judiciales y el entrelazamiento con el mundo económico”.

En cuanto a la investigación criminal que se viene desarrollando en Santa Fe, sostuvo: “Se sigue investigando en términos generales como si se investigaran robos y hurtos porque el sistema penal está volcado a la investigación de delitos simples.

Si hay crimen organizado, hay protección estatal. Es muy difícil que pueda haber expansión de redes criminales que abastecen el mercado de consumo de bienes de manera ilegal que no tengan algún grado de protección estatal. Porque, entre otras cosas, tienen una fuerte territorialidad, con lo cual, estas organizaciones invierten en protección estatal policial.

Fíjense que en la causa Los Monos o Alvarado –se está llevando a cabo la investigación con la imputación firme de Esteban Alvarado–también hay policías implicados. Entonces lo que yo veo es que hay una suerte de desfasaje. Le cuesta un poco al sistema penal, le cuesta al sistema político en Santa Fe entender que esto ya no es un pueblo donde se puede dormir con la puerta abierta”.

En otro tramo, también cuestionó: “El mundillo ilegal de Alvarado tiene más de una década. Entonces la pregunta que me hago es ¿nadie vio esto? ¿Cómo puede ser que Alvarado con una trama criminal compleja competía por mercados aparentemente vinculados a ilegalidades con el grupo de Los Monos no haya sido visibilizado por el Estado, por los organismos de persecución penal y policial y recién ahora, a partir de un homicidio de Lucio Maldonado se le empiece a poner ojo?”

“Yo veo que acá Los Monos son una marca registrada y acá, cualquier delito le viene bien a un montón de gente que sea de Los Monos. Sin embargo, en la última acusación a Esteban Alvarado, vemos una organización criminal muy robusta con un nivel de protección policial de un escalón muy alto”, advirtió.