La modificación de la fórmula jubilatoria que el presidente Javier Milei implementó por decreto provocó que los haberes registraran una pérdida de 32% en términos reales, en comparación con un escenario en el que los aumentos hubieran continuado definiéndose bajo el esquema anterior. Según un informe del Centro de Economía Política de Argentina (Cepa), la jubilación mínima sería de $403.302 en lugar de los $304.726 actuales (sin contar el bono).
La semana pasada, el Senado convirtió en ley el proyecto que establece un incremento excepcional y de emergencia de 7,2% para jubilaciones y pensiones, junto con un incremento del bono, que pasaría de 70 mil pesos a 110 mil y se actualizaría por inflación. Sin embargo, el Gobierno confirmó que vetará la norma.
Tres meses después de asumir la presidencia, Milei estableció por decreto una recomposición del 12,5% para jubilaciones y modificó la fórmula en base a la cual se actualizaban los haberes, para comenzar a definir los ajustes a partir de la inflación que mide el Indec, pero con un atraso de dos meses con respecto al período en el que se aplica el aumento.

De acuerdo al informe del Cepa, si se hubiera sostenido la fórmula anterior –que combinaba la evolución de los salarios con la recaudación– los jubilados habrían pasado a cobrar haberes más altos desde septiembre del año pasado.
Según los cálculos del informe, hechos en base a datos del Indec y Anses, una jubilación mínima alcanzaría los $403.302, un 32% más que los $304.726 actuales.
El informe indica que esto se debe al momento en el que se hizo el cambio, que fue cuando la inflación comenzó a desacelerarse y, por lo tanto, la fórmula anterior comenzaba a tornarse favorable. En términos fiscales, esta modificación le evitó al Gobierno ir a un escenario en el que se disparara el gasto previsional, pero al mismo tiempo le quitó la posibilidad a los jubilados de una recuperación de sus haberes.
El informe del Cepa también tiene un apartado para el bono, que se mantiene congelado en $70.000 desde marzo de 2024. En este caso, una indexación al Índice de Precios al Consumidor del Indec lo habría llevado hasta $158.000 en junio de este año.
Jubilaciones en Santa Fe
El centro de estudios también elaboró otra publicación sobre el impacto del ajuste previsional en Santa Fe, en donde se cuentan 448.000 beneficiarios de Pami entre las 484.000 personas jubiladas. “El congelamiento del bono previsional, la eliminación del refuerzo mensual para jubilados de menores ingresos y la suspensión del reintegro del IVA para consumos básicos configuran un cuadro de pérdida sostenida de poder adquisitivo, que repercute tanto en la calidad de vida de los adultos mayores como en la dinámica económica local”, indicaron. Además, agregaron: “Considerando una inflación de 1,7% para el mes junio (REM-BCRA), las jubilaciones mínimas con bono, en el trimestre abril - junio, se encuentran 15% debajo del último trimestre del gobierno anterior. Por su parte, la jubilación sin bono se ubica 2,3% por debajo del mismo período”. En Santa Fe, sumaron, alrededor de 255.949 jubilados cobran la mínima con bono o menos, y para este grupo la pérdida agregada asciende a $225.094 millones. También en la provincia, “la desaparición del bono de $15.000 generó una pérdida agregada de $126.172 millones para los jubilados”.