Los cuatro gendarmes que fueron detenidos el pasado martes tras el robo de aproximadamente un millón de pesos en un control vehicular en el barrio Nuevo Alberdi, fueron imputados este viernes. Todos quedaron en prisión preventiva efectiva por el plazo de ley, según la resolución del juez Hernán Postma.
La audiencia se llevó a cabo en el Centro de Justicia Penal, donde el fiscal Iván Enríquez acusó a los agentes Alejandro David Pacheco, Santiago Hernán Romero, Carla Cecilia Santillán y Diego Emanuel Torales por abuso de autoridad y hurto agravado. En el caso de Romero también se agregó el delito de coacciones.
De acuerdo a la imputación, el pasado martes a las 22.45 los gendarmes frenaron un auto en Bouchard y Servellera y obligaron a bajar del mismo a una pareja con su hijo. El fiscal señaló que los ocupantes ya habían sido identificados y no había ningún motivo legal para realizar la requisa.
Uno de los agentes, según la investigación, robó el dinero en efectivo y lo guardó en la camioneta de la fuerza de seguridad nacional. Luego, hicieron subir a los ocupantes al auto y todos se fueron del lugar.
Cuando las víctimas se dieron cuenta del robo, el gendarme Hernán Romero los abordó en Machain y Maciel y les dijo que podía devolverles el dinero a cambio de que no hicieran la denuncia. También sugirió que, de hacer la presentación, podrían tener consecuencias, en un claro acto de intimidación, según ponderó el funcionario del Ministerio Público de la Acusación.