El Ministerio Público Tutelar autorizó a Mauro Icardi para que vuelva a ver a sus hijas. Según la disposición, el futbolista puede retirarlas del colegio y deberán regresar el lunes. Luego, la misma entidad evaluará el estado emocional de Francesca e Isabella.
Según trascendió, fueron las propias niñas quienes insistieron en solicitarle nuevamente al juez el encuentro con su padre. Así, la escuela envió una solicitud para que Icardi pudiera llevarse a sus hijas.
Ante esto, el juez Adrián Hagopian, quien lleva adelante la causa, había respondido: "En atención a la llamada telefónica recibida por parte de la Directora del colegio Lincoln, Sra. Silvina López Fernández, quien informó sobre la pretensión del señor Mauro Icardi de retirar a sus hijas del establecimiento escolar el día de la fecha".
"Hágase saber al señor Icardi y a la directora del establecimiento escolar, que por el momento y hasta tanto se resuelva la petición formulada el 3 de junio de 2025, se prohíbe al progenitor Mauro Icardi retirar a sus hijas Francesca e Isabella del establecimiento escolar", continuaba el comunicado.
Sin embargo, la decisión se modificó y el juez Defensor de Menores hizo saber a Nara, como medida cautelar que "previo a ausentarse del país, deberá indefectiblemente proporcionar al progenitor, al colegio y al juzgado, los datos de quienes se quedarán con sus hijas".
A su vez, Hagopian le solicitó a Icardi que proporcione información de quien le brinda tratamiento psicológico. Esta información deberá ser brindada en un plazo máximo de 10 días.
"En este estado, resultado de la evaluación del Ministerio Público Tutelar, con voluntad manifestada por las menores y lo dictaminado precedentemente, también de carácter cautelar, autorizo al señor Mauro Icardi, mientras la señora Nara no se encuentra en el país, a retirar a sus hijas del colegio, que meriende con ellas y las reintegre al hogar materno", concluye el último escrito.
No obstante, la órden indica que el futbolista deberá respetar las actividades de las nenas después del colegio. Un punto fundamental es que deberá concurrir solo, sin acompañante, para profundizar la relación con sus hijas, hasta que se evalúe y resuelva otra modalidad de comunicación.
