El ministro Pablo Cococcioni planteó su mirada sobre la Reforma. “Tras más de 60 años, sin ser actualizada, debemos plasmar en la Constitución modificaciones que impidan que los vaivenes políticos afecten lo que hemos logrado en Seguridad, para reducir la violencia y tener presos a los principales narcos y sicarios de esta provincia. Esto no puede quedar a merced de los garantistas”.
Este domingo los santafesinos elegirán a quienes reformarán la Constitución Provincial. "Más allá de la innegable necesidad de actualizarla a los tiempos que corren, definir qué debe quedar plasmado en la nueva carta magna es vital para que represente a los ciudadanos y al futuro que queremos para la provincia de Santa Fe", señaló.
Al respecto, el ministro de Seguridad de la provincia, Pablo Cococcioni, remarcó: “No podemos seguir pensando en una Constitución que no contemple la seguridad como un derecho fundamental. Sin seguridad, la vida cotidiana de los ciudadanos se vuelve insostenible, y ese debe ser un compromiso prioritario en esta reforma”.
“Sin duda, uno de los reclamos unánimes en las últimas décadas tiene que ver con la creciente inseguridad, las normativas vigentes y el uso que se hace de ellas por quienes, evadiendo la ley reiteradamente, se dedican al delito e incluso cometen asesinatos”, dijo el funcionario. En ese sentido, Cococcioni subrayó: “La seguridad no es solo un problema, es un derecho esencial que debe equipararse al resto de los derechos consagrados en nuestra Constitución. Si no tomamos medidas claras para combatir el delito y proteger a los ciudadanos, estaremos fallándoles”.
Para el ministro santafesino “las constituciones, en general, se han preocupado por establecer límites al poder para evitar la tiranía y el totalitarismo. Originalmente, el problema político era proteger al ciudadano de los abusos del propio Estado. Si bien ese objetivo debe mantenerse, existen cambios de paradigma que nos llevan a repensar la idea de Seguridad y de Justicia”, propuso, y expresó: “Sin justicia no hay seguridad. La lógica de “puerta giratoria” debe quedar atrás. Necesitamos castigos justos para quienes hacen daño y penas severas para quienes reinciden en el delito. Esta reforma es nuestra oportunidad de sentar bases claras y firmes para garantizar la paz social”.
Contra los garantistas
Para evitar que las políticas que han combatido el delito queden a merced de los vaivenes gubernamentales, es fundamental que se consagren en la nueva Carta Magna. Cococcioni destacó: “El Estado debe planificar y ejecutar su política de seguridad en todos los niveles. La prevención, la investigación y la ejecución de penas no pueden estar separadas, tienen que formar parte de un sistema integral y efectivo”.
El Gobierno de la provincia de Santa Fe, según el ministro, ya está dando pasos en esta dirección. Y mencionó: “Estamos construyendo un sistema que diferencia entre aquellos que tienen intención de rehabilitarse y quienes, lamentablemente, deben ser neutralizados para proteger a la sociedad. Esto incluye desde la modernización de nuestras cárceles hasta centros especializados como el que denominamos ‘El Infierno’, destinado a individuos de alto perfil”.
Finalmente, los procesos judiciales también son un pilar fundamental. Cococcioni afirmó: “Para garantizar la seguridad, necesitamos procesos rápidos, eficientes y modernos. Las herramientas tecnológicas y un enfoque profesional en la gestión judicial son indispensables. La Justicia tiene que ser accesible, pero también firme”.