Y un día, la marcha imparable de Newell's como local se cortó. Lo hizo porque se chocó contra un rival duro, concentrado y siempre ordenado que le impidió desarrollar su juego, le tendió una red sobre sus jugadores más lúcidos y lo complicó varias veces en su área, al punto de haber convertido a Alan Aguerre en la figura.

Por la novena fecha del torneo de la Superliga, la Lepra empató sin goles con Banfield y le puso fin a su racha de victorias consecutivas en casa. Fueron cuatro en total antes de este reparto con la escuadra de Falcioni, que también está luchando por lograr la permanencia esta temporada. Un negocio que les cerró a los del sur.

Fue un cotejo parejo y el empate pareció ajustarse al trámite, a pesar de que la visita tuvo las ocasiones más nítidas. Banfield se plantó 4-4-2 y lo esperó, mientras que la Lepra no tuvo esta vez un generador de juego: Villarruel y Denis no lograron manejar la pelota con criterio y arriba, Maxi estuvo desaparecido y Albertengo y Salinas quedaron atrapados por la marca.

Salinas nunca encontró el espacio para lastimar. (Alan Monzón / Rosario3)
Salinas nunca encontró el espacio para lastimar. (Alan Monzón / Rosario3)

De hecho, fue Banfield el que acabó dejando la mejor imagen: en la última del primer tiempo, contó con un tiro libre recto al arco de Vittor que tapó muy bien abajo a la izquierda Aguerre. El local sólo tuvo un cabezazo de Salinas y una demora de Albertengo que propició el quite de Gómez. Se fueron al descanso dejando la sensación de que el reparto estaba bien.

En el complemento, la cosa no cambió. Kudelka no hizo ningún retoque y a Newell's le siguió costando mucho armar juego y llegar con peligro. A los 14', Aguerre tapó una de las más difíciles de la noche: un cabezazo de Carranza en el área chica, de pique al suelo. Recién a los 17’ puso a Insaurralde por Denis y ahí el equipo empezó a ser algo más ancho y profundo.

Después de otra buena tapada del 1 leproso a Junior Arias, a los 25' Newell's pudo tejer una buena jugada colectiva: Maxi abrió para Bíttolo, éste mandó para para Maxi dentro del área, la bajó de cabeza para Salinas y el delantero intentó una chilena que se fue por arriba. Y un minuto más tarde, Bíttolo habilitó a Salinas, éste abrió para Gabrielli y el uruguayo disparó desviado. Parecía que el fútbol leproso se despertaba, pero...

Pero el ímpetu llegó hasta ahí. El conjunto ñubelista no tuvo ideas y los cambios de Alexis por Salinas y Moreno por Villarruel no modificaron nada en los minutos finales. Ya sobre el final llegó a los ponchazos, empujando, pero Bravo se lo sacó del buche a Albertengo; y también sufrió, ya que a los 46’ Urzi mandó el centro bajo y Fontana no pudo darle con precisión. El pitazo final de Lamolina apagó el partido y sólo quedó tiempo para otra escaramuza entre los revoltosos Lema y Civelli.

La escaramuza del final. (Alan Monón / Rosario3)
La escaramuza del final. (Alan Monón / Rosario3)


Banfield hizo su negocio y se llevó una unidad que le permite, por ahora, seguir fuera de la zona de descenso. Fue su sexto encuentro sin anotar. Del lado de Newell's, éste fue el primer duelo sin goles a favor y el primero que no gana en su reducto. Y mantuvo la ventaja de un punto sobre este rival con un partido por recuperar. 

Esta vez, lo futbolístico quedó en el haber. Una licencia que puede darse por todo lo bueno que había hecho hasta acá. Lo matemático aún lo sigue acompañando. Motivos suficientes para evitar preocupaciones desmedidas y seguir apostando por un plantel que parece tener mucho más para dar que lo que entregó esta noche.