Los bomberos del Vaticano instalaron este viernes la chimenea y la Capilla Sixtina ya está lista para iniciar el cónclave el próximo miércoles 7 de mayo. Se trata de la tubería conectada a una chimenea desde la que los cardenales notificarán luego de cada votación si hubo o no acuerdo para elegir al nuevo Papa.

Según informaron desde la Santa Sede, durante el día se realizarán algunas pruebas para corroborar que el tiraje esté bien instalado y asegurar así que el humo logre salir por la chimenea.

A partir del miércoles 7 de mayo, en el interior de la Capilla Sixtina se encerrarán los 133 cardenales con menos de 80 años que están habilitados para votar al próximo Papa. El histórico evento que captará la atención del mundo tendrá un foco especial sobre el humo que saldrá de la chimenea ya que, en el caso de ser blanco es que hubo acuerdo entre los representantes de la Iglesia y que hay un nuevo Sumo Pontífice. Si el humo es negro, es que los acuerdos todavía no prosperaron.

Además de la chimenea, trabajadores del Vaticano también montaron un piso provisorio sobre parte de la Sixtina para garantizar el acceso a los cardenales con problemas de movilidad. También comenzaron a montar las mesas y los bancos donde se sentarán para emitir a mano su voto.