Newell's anunció la salida de Keylor Navas este lunes por la noche a través de un comunicado oficial, poniendo fin a un ciclo de apenas seis meses del arquero costarricense en el club del Parque Independencia.

La leyenda internacional, que llegó en enero de 2025, deja un legado de grandes actuaciones empañado por tensiones internas que marcaron su adiós rumbo a Pumas de México.

Navas aterrizó en Rosario el 21 de enero de 2025 como agente libre tras su paso por el PSG, firmando un contrato hasta diciembre de 2026. Su llegada generó una enorme expectativa. La directiva lo presentó como “una leyenda internacional”, y el propio Messi, amigo cercano, influyó en su decisión de sumarse a la Lepra.

En sus seis meses en la ciudad, Navas disputó 16 partidos en todas las competiciones, recibiendo 11 goles y logrando seis vallas invictas, con un destacado 43% de arcos en cero en la Primera División 2025, de acuerdo con FootyStats.

En 14 encuentros de liga, acumuló 1260 minutos, realizó 58 atajadas, siendo figura en cada uno de los partidos. Uno de los momentos más memorables fue su actuación frente a Tigre, donde registró 12 atajadas en un solo partido, superando su propio récord personal de 10 atajadas en un encuentro de Champions League entre PSG y Real Madrid.

Además, Navas encadenó siete partidos sin derrotas y cuatro vallas invictas consecutivas hacia abril, consolidando la defensa leprosa en duelos clave contra Belgrano, Boca Juniors, Kimberley y Argentinos Juniors.

A pesar de su calidad indiscutida, el paso de Navas por Newell's estuvo marcado por conflictos extradeportivos. El primer cortocircuito se produjo en el debut del Torneo Clausura frente a Independiente Rivadavia, cuando el arquero se ausentó alegando un malestar estomacal. Esta decisión generó molestias en el cuerpo técnico liderado por Cristian Fabbiani, ya que obligó a incluir al lesionado Darío Benedetto como arquero suplente.

Rumores de una deuda salarial circularon, aunque Navas los desmintió en redes sociales. El segundo episodio ocurrió antes del partido contra Banfield, cuando Navas solicitó no ser titular. Fabbiani, en respuesta, lo excluyó incluso del banco de suplentes, marcando un quiebre en la relación. Estas tensiones, sumadas a la presión de los hinchas y la directiva, aceleraron las negociaciones para su salida.

Esta actitud, percibida como una maniobra para forzar su salida a Pumas, desató la furia de los hinchas. En el estadio, algunos aficionados lo encararon durante el calentamiento con gritos como:

“¡Pedí disculpas, Keylor! ¡Esto es Newell's, no Costa Rica, no te confundas!”. En X, las críticas fueron contundentes: “Navas fue la salvación en el primer semestre, pero lo que tiene de inmenso arquero no lo tiene de profesional. Una gran desilusión”, escribió un usuario. Otro hincha expresó: “Por menos Keylor Navas, que mostró cero profesionalismo y fue desagradecido con Newell's, que lo reinsertó en el fútbol”.

Según trascendió, Navas ofreció pagar parte de su transferencia para facilitar su pase a Pumas, que finalmente se concretó tras una oferta inicial de 1.3 millones de dólares rechazada por la Lepra.

Un adiós con sabor agridulce

La salida de Navas deja un vacío en el arco rojinegro, pero también reflexiones sobre su breve estadía. Éver Banega, capitán del equipo, fue claro: “Newell's siempre está por delante”. Por su parte, Fabbiani evitó profundizar en el tema, enfocándose en el futuro del equipo. La directiva ya evalúa reemplazos, con nombres como Esteban Andrada y Sergio Romero en el horizonte.

El paso de Keylor Navas por Newell's será recordado por sus atajadas memorables y su profesionalismo en el campo, pero también por las dificultades para adaptarse a las dinámicas del club. A los 38 años, el costarricense buscará un nuevo desafío en México, dejando en Rosario un capítulo corto, pero lleno de intensidad. Se espera que en las próximas horas emita un comunicado tras su despedida.