Cinco sospechosos de integrar el remanente de la estructura criminal del narcotraficante Fabián “Calavera” Pelozo fueron detenidos en una redada realizada en Rosario, localidades del Gran Rosario y la provincia de Buenos Aires, encabezada por personal de Gendarmería Nacional, informaron fuentes de la investigación a Rosario3.
El juez federal de Rosario Carlos Vera Barros dictó en 2024 el procesamiento de Pelozo como líder de una asociación Ilícita dedicada al transporte de drogas y al lavado de dinero.
Los arrestados están bajo sospecha de haber participado –en distintos grados– en el doble homicidio de dos miembros de la banda bonaerense Los Lindos: Silvio David Vitullo y Diego Fabián Segura, quienes fueron quemados vivos en un acto de venganza presuntamente orquestado por Pelozo.
El móvil habría sido el robo de una camioneta Toyota Hilux que pertenecía al propio “Calavera” y que, según la acusación fiscal, estaba cargada con drogas y lingotes de oro. El vehículo fue sustraído en noviembre de 2022 en las inmediaciones del penal de Ezeiza, donde allegados a Pelozo lo habían ido a visitar.

Los cuerpos calcinados de Vitullo y Segura –ambos mecánicos– aparecieron dentro de un utilitario Citroën Berlingo en la localidad bonaerense de Guernica, en diciembre de ese mismo año. Ese expediente federal por el doble crimen es una de las principales causas penales que enfrenta Pelozo, quien ya acumula tres condenas: dos a 15 años por tráfico de cocaína vía “taxi aéreo” a la región, y otra a 4 años por portación de arma.
Según la hipótesis de los fiscales de la Procunar, el robo de la Hilux fue ideado por dos miembros de Los Lindos, Elbio Emanuel “Ema” Techera y Rubén Alberto “Rojaijú” Báez, quienes estaban detenidos en Ezeiza y habrían accedido al dato del valioso cargamento por medio de corrillos carcelarios.

En represalia, Pelozo habría coordinado una verdadera cacería en el conurbano bonaerense, movilizando a una decena de sicarios en al menos cinco autos. Los atacantes reventaron puertas y aguantaderos buscando a los autores del robo. Paralelamente, Techera y Báez fueron apuñalados dentro del penal.
Por ese doble crimen, calificado por ensañamiento y alevosía, ya están procesados por el Juzgado Federal Nº 3 de Rosario, a cargo de Vera Barros: Pablo de la Serna y Gustavo Fabián González (como coautores); Emilio Rubén Miranda y Carolina Tschernitschek (como partícipes necesarios); y el propio “Calavera” Pelozo junto a su mano derecha, el barra de Rosario Central Carlos Andrés “Gordo Bichi” Suárez, en calidad de instigadores.
La investigación, sin embargo, continuó. El viernes pasado, personal de GNA detuvo a cinco hombres en Rosario, Roldán, Granadero Baigorria y en la localidad bonaerense de Monte Grande.
Entre ellos está Walter Pelozo (33), hermano de “Calavera”, acusado de encubrimiento agravado por haber hecho desaparecer uno de los vehículos utilizados por los sicarios en las tareas de inteligencia: un VW Gol Trend. Un rol similar se le atribuye a Andrés Damián M. (49), quien presuntamente entregó el auto a una concesionaria de Rosario.
También fue detenido Facundo Ismael R. (30), señalado como uno de los autores materiales del asesinato de Vitullo y Segura. A Gonzalo Lionel L. (34) se le adjudica el mismo papel.
Estas cuatro detenciones se concretaron en el Gran Rosario.
El quinto arrestado fue Brian Gabriel M. (30), oriundo del barrio El Triunfo de Monte Grande. Según la acusación, prestó su casa para mantener cautivos a Vitullo y Segura, quienes fueron “chupados” mientras circulaban en un Peugeot 504.
Se espera que los cinco nuevos detenidos también sean imputados por integrar la asociación ilícita que habría encabezado Pelozo, considerado uno de los narcos más importantes de la región.
Paralelamente a la causa por el doble crimen de los integrantes de Los Lindos, Pelozo está procesado por organizar el transporte de 900 kilos de cocaína –de los cuales la mitad fue secuestrada en San Justo el 1° de julio de 2024–. Él y su entorno también enfrentan cargos por lavado de activos.
“Calavera” fue detenido en marzo de 2022, luego de que se lo vinculara a uno de los episodios más sangrientos de la historia criminal de Santa Fe, conocido como “la boda narco”.