Aunque no trascendió qué cargos pesan en su contra, el Ministerio de Seguridad de Santa Fe anunció la detención de Mauricio Ayala, señalado como un actor de peso en la venta de drogas y en disputas territoriales en la zona oeste de Rosario. En teoría, Ayala estuvo prófugo durante un año y medio.
El arresto se concretó en la localidad de Roldán mediante un operativo conjunto entre la Tropa de Operaciones Especiales (TOE) y la llamada Central de Inteligencia Provincial, indicaron voceros de la cartera de Seguridad.
En marzo de 2024, la TOE ya había allanado una vivienda vinculada a Ayala en esa misma ciudad, por orden del fiscal provincial Franco Carbone, aunque el sospechoso no fue localizado en esa ocasión. En cambio, la irrupción policial terminó frustrando un ritual umbanda con sacrificio de animales en el que participaban familiares del prófugo.
Ayala posee una condena previa por tentativa de homicidio y está sospechado de regentear varios búnkeres en la zona oeste. Su nombre apareció vinculado a una escandalosa causa judicial que mantiene detenidos a tres policías provinciales acusados de plantar un arma a un joven, con el fin de perjudicar al clan narco conocido como los Tripi, y así desviar una investigación por intimidación pública.
Según la investigación fiscal, ese mismo armamento habría sido utilizado en al menos seis atentados a tiros entre diciembre de 2023 y enero de 2024. Entre los blancos figuraron amenazas al gobernador Maximiliano Pullaro y maniobras con firmas falsas para entorpecer la pesquisa.
La sospecha es que Ayala entregó esas armas al policía Marcos Molina, quien recientemente firmó un juicio abreviado en total sigilo.
Molina, a su vez, habría derivado las armas a dos agentes del Comando Radioeléctrico, quienes realizaron un procedimiento irregular el 31 de enero en Rouillón y pasaje Ancuña, donde fue detenido un allegado al clan Tripi.
Sin embargo, la orden de captura de Ayala en el fuero provincial ya fue dejada sin efecto. Su detención actual responde a un pedido de la Procunar (Procuraduría de Narcocriminalidad), cuyos detalles no fueron divulgados.
El arresto se produjo días después de un episodio oscuro en inmediaciones del Distrito Oeste. El 27 de mayo pasado, personal del Comando reportó la aprehensión de un tal Mauricio Javier Ayala en La Paz y Pascual Rosas, bajo un supuesto pedido de captura vigente firmado por el fiscal Carbone. No obstante, trascendió que el detenido habría proporcionado una identidad falsa y que supuestamente no se trataba del verdadero prófugo.