Lilia Lemoine habló de la agresión que recibió el fotógrafo Pablo Grillo - quien se encuentra internado en grave estado luego de una cápsula de gas lacrimógeno impactara en su cabeza - y fue polémica ya que señaló que se trató de un "accidente" y de algo "normal".

“No podés hacer un omelette sin que se rompan un par de huevos”, sostuvo la legisladora, y planteó que la situación se trató de “un accidente, algo normal que ocurra en ese contexto” de violencia y enfrentamiento entre manifestantes y efectivos de las fuerzas de seguridad.

En esa misma línea señaló que lo ocurrido “fue un horror, pero no es culpa de la policía”. Y responsabilizó al profesional por estar sacando fotos en ese momento y lugar. "Hay cosas que no se pueden controlar, si vos generás una situación de tal violencia, y ponés gente que no tiene que estar ahí... Porque ese fotógrafo no tenía que estar ahí, estaba entre la policía y los manifestantes, ese no era su trabajo, no vive de eso”, indicó Lemoine.

Algo similar declaró la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, este jueves por la noche. “Es lamentable, pero las fuerzas estaban accionando de acuerdo a la necesidad de dejar liberada esa zona, y no permitir que los violentos sigan rompiendo, todo. Lamento que esté entre la vida y la muerda, es algo trágico”.

“El policía tira la granada de manera correcta, a 45 grados, a una distancia muy prudencial; la diferencia es que el fotógrafo estaba muy agachado y la granada toca el piso y no sabemos si se desprende un fierro o es el cartucho de la misma granada que rebota en el piso y, al estar casi agachado, le impacta en la cara”, agregó.