Franco Armani fue protagonista estelar del empate 1 a 1 de Argentina ante Paraguay, por la segunda fecha del grupo B de la Copa América. El arquero nacional detuvo un penal clave con el cotejo igualado y luego le hizo el clásico gesto de pedir silencio a la tribuna.

El arquero se sacó la bronca con el penal atajado. (EFE)


"Me saqué la bronca porque cada situación que nos crea el rival es gol. Me descargué y más en un penal, que era un momento decisivo para nosotros: el 2 a 1 hubiera sido difícil", explicó.

Según el 1 de River, "tuvimos la pelota, pero nos faltó profundidad en los últimos metros. Fuimos más preciso a la hora de tener la pelota que en el debut, faltó el último pedacito para convertir", añadió.

Armani mantiene un mensaje de optimismo de cara al futuro: "Creo que el domigo vamos a ganar y clasificar. Con la fe, la esperanza intactas, confiando en Dios que obtendremos la clasificación".