Si fue la despedida, resultó ideal. Rosario Central derrotó 3 a 1 a River en el Gigante de Arroyito y logró meterse en zona de clasificación a playoffs. Además, está entre los clasificados a la Copa Libertadores, a una fecha de que finalice la fase inicial de la Copa de la Liga. Por si fuera poco, estiró su racha invicta en casa a 28 partidos. 

No fue facil. El Canalla empezó en desventaja por un gol de Barco en la primera llegada a fondo de River. Parecía que el partido comenzaba a inclinarse hacia un lugar sin retorno. 

Antes de que se acabe el primer tiempo, ocurrió algo que cambió el partido. Fue el ingreso de Martínez Dupuy por Cervera, lesionado. Eso lo cambió todo porque lo primero que hizo el mexicano fue igualar el partido cuando nadie lo esperaba. Campaz metió un desborde notable y le sirvió a Dupuy el empate.

 

El Bicho había hecho amonestar a Simón y lo encaró sabiendo que si lo tocaban, River se quedaba con uno menos. Campaz empezó a confirmar que sería la gran figura del partido. 

En el complemento, el colombiano se juntó con Malcorra en un córner y gestaron juntos el segundo. Un centro rastrero del "10" generó que González Pirez la meta en su propio arco. 

River sintió el golpe. Ya no estaba Simón, lo reemplazó Herrera, pero Campaz en la primera lo hizo amonestar. El equipo de Demichelis comenzó a tocar la pelota de manera intrascendente y Central lo aprovechó. 

Mucho más cuando Enzo Pérez recibió la roja luego de dos amarillas. Un gesto claro de lo perdido que estaba River en el partido. 

El Canalla debía manejar el trámite a favor y supo hacerlo. Lo pudo liquidar antes cuando Martínez Dupuy erró un gol imposible de contragolpe. 

De todos modos, lo logró con el manejó del que mejor lo hace y la definición del mejor jugador del equipo. Malcorra asistió a Campaz y el Bicho puso el tercero. 

El partido se terminó. No había nada más para hacer. El Canalla volvió a jugar un gran partido en casa, demolió a uno de los mejores equipos del torneo y sigue peleando.