Este martes 3 de junio, en la sala 7 del Centro de Justicia Penal de Rosario, comenzó el juicio oral por el asesinato de Nelson “Chivo” Saravia, un referente de la barra brava de Newell's que fue acribillado en octubre de 2021 en la zona oeste. El fiscal Luis Schiappa Pietra, del Equipo Fiscal Transitorio en Violencias Altamente Lesivas, pidió prisión perpetua para cuatro de los acusados del crimen.

El hombre fue asesinado a tiros mientras dormía en su casa ubicada en San Nicolás al 3700, en barrio Alvear. De acuerdo a la información preliminar, al menos cuatro personas ingresaron al domicilio y abrieron fuego contra la víctima, que perdió la vida en el lugar.

Nelson “Chivo” Saravia, de 43 años, estuvo al frente de la barra de Newell’s entre 2012 y 2015, aproximadamente.

De acuerdo a los indicios que dejaron trascender los fiscales, unos 22 sospechosos se reunieron en una casa ubicada en Garibaldi al 3300, el domicilio de Guillermo “Chupa” Sosa, otro barra brava de Newell’s, por quien también se pidió prisión perpetua, y planificaron el ataque.

Allí, se repartieron armas, prepararon los vehículos, se asignaron los roles y cambiaron sus vestimentas. Todo quedó filmado en cámaras internas de la propiedad.

Alejandro “Rengo” Ficcadenti, uno de los cabecillas de la barra brava de Newell’s, supo transitar algún tramo de la investigación en libertad, pero ahora también está alcanzado por el pedido de prisión perpetua. Para los acusadores, fue quien participó en la presunta instigación del homicidio y además colocó un cargador para 30 municiones en una de las armas que se usaron para la emboscada fatal.

Ficcadenti, en un momento jefe de la facción disidente de la barra brava de Newell’s, también fue acusado en agosto de 2024 por las amenazas a la familia de Ángel Di María.

También forman parte del juicio y piden la misma pena para Esteban A. de 30 años y Alexis D. de 25, quienes formaron parte de la comitiva que ejecutó el plan criminal, en el marco de la puja por el poder de la tribuna leprosa. 

El grupo rompió a patadas la puerta de la casa de Saravia, se metió al dormitorio y lo acribilló con una ametralladora. Al momento del ataque, la víctima estaba con su hijo y su sobrino –de 8 y 13 años, respectivamente–, a quienes empujó para evitar que sean lesionados.

La vivienda donde asesinaron a Saravia en San Nicolas al 3700.

Según las filmaciones de la cámara de la casa de “Chupa” Sosa, volvieron a esa propiedad a cambiarse de ropa, dejaron las armas y se relataron entre ellos cómo había sido el asesinato. 

El tribunal que los juzgará está integrado por los jueces de Primera Instancia, Nicolás Vico Gimena, Ismael Manfrin y Pablo Pinto.