El ícono de la menstruación llegará a Whatsapp y a otros servicios de mensajería este 2019, en este caso se trata de una gota de sangre. La iniciativa surgió por parte de la ONG Plan Internacional "para romper con el tabú existente en torno a la "regla" en muchas sociedades".
La convención Unicode, que es la organización que decide sobre los símbolos de los mensajes, decidió la incorporación de alrededor de 230 agregados. El evento se realizó en la ciudad de Nueva York, en el The Bell House en Brooklyn, ante unas 200 personas.
A pocas semanas de la sorpresa por la incorporación del mate argentino a los íconos, también incluyeron a un perro guía, un audífono, una silla de ruedas y al esperado símbolo de la menstruación. El emoji se solicitó hace casi dos años por organizaciones internacionales, que consideran que siendo un lenguaje universal ayudaría a acabar con el tabú de la regla en muchos países.
La ONG Plan Internacional, junto con otras agrupaciones, propusieron diferentes elementos para representar la idea: bragas, toallitas femeninas, un calendario o simples gotas de sangre que expresan emociones. Más de 54.000 usuarios sufragaron en favor de un ícono en el cual había una bombacha con una gota de sangre. Sin embargo, aquel diseño fue rechazado por Unicode.
A partir de ello se propuso el diseño de una gota roja, que sí fue aprobada para su incorporación. Según datos desarrollados por Plan International, la mitad de las jóvenes de entre 18 y 34 años encontrarían más fácil hablar con su pareja del período si tuviesen un ícono para ello.
"El emoji es hoy nuestro lenguaje universal, y como tal, tiene sentido utilizarlo para que la regla deje de ser el tabú que aún hoy sigue siendo en todo el mundo, aunque 800 millones de mujeres y niñas estén teniendo la regla en este momento. En África, una de cada diez nenas falta al colegio varios días por la regla. Y el estigma, la falta de acceso a productos o a saneamiento son en muchas ocasiones motivo de abandono escolar", explicó al diario ABC de Madrid Emilia Sánchez, directora de incidencia política de Plan International.
A días de la entrega del premio Oscar a "Period. The end of Sentence" como mejor corto documental, siguen surgiendo voces que buscan derrumbar tabúes. En este caso, la norteamericana de origen iraní, Rayka dirigió el cortometraje producido por Netflix que relata una realidad en India: cómo un grupo de mujeres de Nueva Dehli aprendieron a producir sus propias toallitas higiénicas.
Junto a la productora (y motor de este proyecto), Melissa Berton, abordaron una problemática en un contexto en donde el "período" es sinónimo de impureza, de vergüenza, de algo malo. Una enfermedad que impide a las chicas a ir a clase durante "esos días" del mes.
Así grafican un círculo vicioso que perjudica a muchas mujeres en el mundo y a las posibilidades que surgen para abrir otro camino, avanzando en la naturalización de la menstruación femenina.
