Con la bandera del relax y el objetivo de desenchufarse surge esta tendencia que implica conocer y participar de una vida más tranquila, mano a mano con la naturaleza y las tradiciones de una región, donde cultivar la tierra, recoger cosechas, andar en bicicleta, hacer turismo en pueblitos, tomar clases de gastronomía, andar a caballo y visitar alguna granja o vivero.

Se trata de una experiencia única, de esas que no se olvidan, sobre todo si compartís tus vacaciones con niños, y que hay que hacer por lo menos una vez en la vida. Te encantará el estilo de travesía; además, podés combinar días de turismo tradicional y otras ciudades cercanas.

Si te vas a la costa por ejemplo, podés buscar hoteles en Miramar para hacer turismo tradicional, disfrutar de la playa y los paseos propios del lugar.

Por otro lado, si querés innovar y poner en práctica esta tendencia, podés averiguar por algún hostel en alguna localidad cercana y salir en busca de una nueva vacación dentro de tus vacaciones.