El Congreso de la Nación sesionó este miércoles de manera virtual por primera vez en su historia, con la participación de la mayoría de los diputados y senadores desde sus domicilios, en el marco de la pandemia de coronavirus. Excepto algunos inconvenientes con el sonido y en el momento de votar para algunos legisladores, en líneas generales, la sesión en ambas cámaras se desarrolló sin mayores dificultades.

El Senado aprobó la validez de veinte Decretos de Necesidad y Urgencia firmados por el presidente de la Nación, Alberto Fernández, durante la primera sesión virtual de la historia de la Cámara alta.

Minutos después de las 14, Cristina Kirchner, presidenta de la Cámara alta, dio inicio a la primera sesión virtual en la historia del Congreso, que tuvo que modificar su protocolo habitual debido a la pandemia de coronavirus, que avanzó en todo el mundo y llegó a la Argentina hace un mes y medio.

Después de tironeos y negociaciones entre el oficialismo y la oposición, los legisladores sesionaron para tratar 20 Decretos de Necesidad y Urgencia firmados por Alberto Fernández en el marco del covid-19.

En el recinto sólo estuvieron los senadores Martin Lousteau, Maurice Closs, Claudia Ledesma Abdala y Laura Rodríguez Machado. La sesión la presidió la ex jefa de Estado. El resto de los legisladores estuvieron en sus despachos o en sus casas siguiendo el debate en forma virtual y esperando el turno para hablar.

El único ausente en esta jornada fue el tucumano José Alperovich, que permanece de licencia luego de que su sobrina lo denunciara por abuso sexual. El ex gobernador se encuentra licenciado desde noviembre del año pasado.

“Verifiquen que sus micrófonos estén muteados”, fue la primera frase que dijo Cristina Kirchner, luego de sentarse y saludar a los legisladores que la miraban a través de la pantalla. Una frase que marca con claridad el hecho histórico y el lenguaje que por estos días ha invadido a la dinámica de muchos trabajados.

En los primeros minutos hubo inconvenientes con el audio de algunos legisladores y del secretario parlamentario. Por momentos, Cristina Kirchner, también se quedó sin audio. Pero el problema se solucionó con rapidez. Luego, hubo un nuevo inconveniente. En el momento que se estaba leyendo la votación sobre los decretos hechos por la presidencia, se empezaron a superponer voces: la del secretario con la de los legisladores que ratificaban el voto que habían hecho porque el sistema no se los había computado.

Una vez resueltos esos primeros problemas, comenzó la ronda de exposiciones. La primera en hablar fue la mendocina Anabel Fernández Sagasti, que destacó las medidas tomadas por el gobierno nacional y apuntó contra el sector de la oposición que pidió salir con mayor rapidez de la cuarentena debido al impacto económico que tendrá el parate de las actividades.

“La economía que recibió el presidente no estaba bien antes de la pandemia. Todo lo contrario. Algunos dirigentes tienen una amnesia selectiva respecto de lo que es el pasado reciente”, sostuvo la senadora de La Cámpora. En esa línea, recordó que cuando llegaron al gobierno había “200 mil puestos de trabajo perdidos, un promedio de 16 pymes que se cerraban por día, deuda externa y 10% de desocupación”.

“Se puso de moda entre los opositores decir que la caída de la economía va a dejar tantas vidas en el camino como la pandemia. Es una falacia lo que intentan imponer. En este paquete de 20 DNU hemos salvaguardado la vida de muchos argentinos y garantizamos derechos sociales y económicos”, dijo, luego de comparar los datos sobre la caída de la economía con los que tienen Chile, Brasil y Estados Unidos, donde el aislamiento no fue tan estricto como en Argentina.

Esos minutos en los que hablo Fernández Sagasti fueron los únicos en los que estuvo presente Cristina Kirchner en las primeras dos horas de sesión. Luego, se levantó y se retiró a su despacho. La sucedió la presidenta provisional del Senado, Claudia Ledesma Abdala.

Una de las palabras destacadas fue la de Martín Lousteau, que pidió ampliar el consejo de epidemiólogos que asesora al Presidente y sumar una mesa económica para poder evaluar los pasos a seguir una vez que termine el aislamiento.

“En materia sanitaria como económica si respondemos tarde, si demoramos, va a ser peor, va a ser muy difícil contener lo que está pasando. Hay efectos permanentes. Hay puestos de trabajo que se van a perder”, afirmó.

El legislador de la oposición dijo que “la salud es prioridad” pero también “es cierto que cuando termine la pandemia y pasen los años, habrá una evaluación en dos dimensiones: la cantidad de vidas que se pudieron salvar y el impacto económico que dejó el parate”.

“El objetivo prioritario es la salud pero tiene que ser con el menor costo económico posible”, sostuvo, al tiempo que pidió trabajar para ordenar y dotar de más datos al sistema del Estado, debido a que muchos de los beneficios otorgados por el Gobierno no fueron efectivizados en su totalidad debido a la falta de datos o el protocolo para poder obtenerlos.

La sesión fue escalando en tensión a medida que pasaba el tiempo y se acumulaban los discursos. La primera en subir el tono de la discusión fue la senadora opositora Silvia Elías de Pérez. “Somos una oposición que entiende perfectamente el rol que tenemos en este momento. Estuvimos a disposición del Presidente. Pero eso no significa que dejemos de cumplir nuestro rol y señalando las cosas en las que no estamos de acuerdo”, sostuvo.

La senadora radical dijo que “hay un sector del gobierno que ha escuchado y prestado atención a las cosas que dijo la oposición” y hay otros sectores “que le faltan el respeto a la oposición”. Luego, cuestionó la cantidad de DNU que sacó el Gobierno. “El problema de la cantidad de delegaciones que se dejan en manos del Presidente y el Jefe de Gabinete es que después es muy difícil volver atrás”, explicó. Y remató: “La democracia se consolida con más democracia”.

Diputados


Con la tecnología como protagonista estelar, la Cámara de Diputados inició a la tarde una sesión histórica. Con la mayoría de los legisladores conectados de manera remota y una minoría presente en el recinto, la Cámara baja, con el comando de Sergio Massa , se apresta a dar media sanción a los primeros proyectos de ley en tiempos de pandemia, inaugurando así una nueva dinámica de debate mientras se extienda la cuarentena.

La Cámara aprobó por unanimidad y giró al Senado el proyecto de ley que exime del Impuesto a las Ganancias las horas extras realizadas por los trabajadores de la salud y de seguridad durante la pandemia de coronavirus y otorga una pensión graciable a los familiares de los empleados fallecidos en esa tarea.

La iniciativa fue aprobada por 252 votos en la primera sesión virtual de la Cámara baja, en un debate que tuvo como características el consenso logrado por todas las fuerzas políticas para dar alivio a los trabajadores de las áreas esenciales.