Tres delincuentes fueron acusados ayer por haber baleado el pasado sábado por la noche un domicilio de Felipe Moré y Esquiú a bordo de un auto robado. Se presume que el vehículo fue sustraído a punta de pistola el 8 de enero pasado de un lavadero ubicado en 5 de Agosto y Melián, en barrio Las Flores, y que fue utilizado para realizar ataques a tiros.
Los imputados por la fiscal Ana Julia Milicic fueron Mauricio Rubén C., de 29 años; Sebastián Alejandro G. I., de 39; y Augusto Álvaro R. R., de 30. Todos quedaron en prisión preventiva efectiva por el plazo de ley, según resolvió el juez penal de primera instancia Héctor Núñez Cartelle.
Los tres sospechosos se desplazaban en un Gol blanco y se negaron a ser identificados en un control policial el sábado por la noche. Esa situación desencadenó una persecución que finalizó cuando el rodado fue abandonado en Junín y pasaje 1528 y tres de los ocupantes continuaron la fuga a pie. En ese contexto fueron aprehendidos Mauricio R. Sebastián G. I. y Augusto R. R.
Dentro del Gol blanco abandonado se encontró una carabina calibre 22 que estaba en el asiento del acompañante. El auto tenía múltiples impactos de bala. Tras una averiguación hecha por los investigadores se constató que el vehículo había sido robado el 8 de enero pasado de un lavadero de Melián y 5 de Agosto. En ese hecho, la víctima, un empleado del negocio, dijo que irrumpieron tres ladrones armados, le gatillaron en la cabeza, pero no salió la bala, y se llevaron el Gol blanco y un Surán gris.
Casualmente, un vehículo Surán gris fue hallado el 12 de enero pasado por el Comando Radioeléctrico en Moreno al 6400. Tenía en su interior varias vainas servidas que fueron secuestradas por la Agencia de Investigación Criminal.
De acuerdo a la imputación hecha este martes, el Gol blanco sustraído el 8 de enero tenía colocadas las patentes de otro vehículo robado el 14 de enero pasado.
Desde otras unidades fiscales se investiga si los imputados tienen vinculación con la banda narco Los Monos.
