Un recluso que se encuentra multi condenado por el crimen de un ladero del capo narco Esteban Lindor Alvarado y varios robos, aceptó este martes un juicio abreviado por varias extorsiones cometidas desde la cárcel. Se trata de Fabio Alejandro Giménez (34), actualmente alojado en el penal de Coronda, quien dio el visto bueno a una pena de 15 años de prisión, acordada entre su defensa y el fiscal Pablo Socca, que fue homologada por la jueza Paula Álvarez.

Giménez, que tenía una condena firme a 13 años y 8 meses de cárcel, ahora tendrá un monto unificado de pena de 28 años y 8 meses de prisión efectiva. En paralelo, en marzo del año pasado recibió en primera instancia una sentencia a perpetua, que aún no está firme, por haber participado en la planificación del homicidio de Nicolás “Fino” Ocampo, lugarteniente de Alvarado, acribillado en abril de 2021, y por instigar la tentativa de homicidio de un empresario de suplementos deportivos, a pedido del responsable de la firma NutriLab.

El abreviado de este martes agrupó siete causas judiciales distintas. La principal es donde está sindicado como líder de una asociación ilícita dedicada a extorsiones, balaceras por encargo y venta minorista de droga. Según consta en los distintos legajos, la organización de algunos de los ataques los delegaba a través de las parejas que tuvo en los últimos años, que lo iban a visitar al penal.

El fiscal Socca le atribuyó al recluso y a otros miembros de la banda haber extorsionado en enero de 2022 a los responsables de una empresa de mudanzas de Rosario para que entreguen una suma de dinero a cambio de no prender fuego un camión o balear la fachada del local. 

Las intimidaciones de Giménez en enero de 2022 se extendieron a otras víctimas. En Villa Gobernador Gálvez, integrantes de su organización dejaron notas en un domicilio en el que exigían que se comunicaran con una línea telefónica para pedirles dinero. Entre enero y febrero de ese año amenazaron al dueño de un kiosco de la zona sur de Rosario, que entregó 300 mil pesos en concepto de “protección”.

También se dirigieron a un comercio de la zona sur, dedicado a repuesto automotor, donde solicitaron 3 millones de pesos. Como los responsables del negocio no dieron el dinero, gatilleros en moto abrieron fuego contra el negocio el 25 de enero de 2022. Cinco días después volvieron a cometer una balacera, pero en este caso contra el domicilio de los dueños, en la zona sudoeste de la ciudad. 

En mayo de 2022, Giménez extorsionó al propietario de un inmueble de Villa Gobernador Gálvez en el que había sido inquilina la pareja del recluso, ya que lo responsabilizaba de las pérdidas sufridas en un allanamiento ocurrido en el marco de una de las investigaciones judiciales. La víctima llegó a dar 100 mil pesos, pero no fue suficiente, ya que el preso después pidió más dinero. En ese marco, se coordinó una entrega controlada en la que varias personas terminaron detenidas.

Producto de los arrestos en la entrega controlada, Giménez volvió a la carga con el propietario de la casa de Villa Gobernador Gálvez, que recibió mensajes en junio de 2022. En un nuevo operativo coordinado por policías encubiertos fueron aprehendidas otras tres personas más, que habían ido a cobrar la plata.