Este viernes a las 21, en La Comedia teatro municipal (Mitre 950) Masmédula celebra el lanzamiento de Perro negro, su primer disco, en formato físico.

El disco está integrado por diez composiciones (propias casi en su totalidad) que el quinteto grabó en 2017 y que, a partir del Programa de Coproducciones Discográficas de la Editorial Municipal de Rosario (EMR) está disponible en CD.

Masmédula se gestó en 2014, en el marco de la Orquesta Escuela de Tango. Actualmente los integran Diego Zavalla, en guitarra eléctrica, arreglos y composición; Inés Dotto, en violín; Manuel Asato, en piano; Martín Carr, en bandoneón; y Cecilia Zabala, en contrabajo. Esta última se sumó a la formación tras la salida de Germán Realini que grabó en el disco.

La agrupación recupera la tradición de las grandes orquestas –como Osvaldo Pugliese– y el presente de (pinista y compositor) Julián Peralta, a vez que plantea una dinámica sonora que refiere al quinteto clásico de Astor Piazzolla: una formación camarística de cinco solistas.

“Piazzolla es la puerta de ingreso de nuestra generación al tango, aunque creo que todos lo tenemos en nuestro ADN”, explica Inés Dotto a Rosario3. “

Los tempranos pasos del grupo –con arreglos ajenos– dieron lugar a las primeras composiciones de Diego Zavalla. Así llegó “Perro negro”.

Para la violinista, Masmédula ofrece “un tango honesto” que tiene una manera personal y colaborativa: “Tratamos de que no suene tan pulcro y ordenado, sino que nos sale un tango más urbano, que tiene los ruidos de la ciudad”.

El grupo también está atravesado por las referencias literarias que se expresan desde el nombre: En la masmédula (1954) es el título de un libro de Oliverio Girondo.

“Girondo era un escritor de vanguardia, un rupturista, que a la vez jugaba mucho con las palabras y los sonidos. Entonces, nos pareció que representaba eso que buscábamos”, reseña Dotto en el diálogo telefónico.

Y si bien se trata de una formación instrumental, las lecturas y el juego fonético de los textos se expresan en las composiciones del álbum; una placa en la que también se escuchan imágenes.

En diciembre de 2018, la agrupación obtuvo un subsidio del Programa de Coproducciones de la EMR que les permitió cumplir con el anhelo de editar Perro negro.

En ese trascurso, Masmédula siguió componiendo y tocando. Y algunas de esas composiciones se escucharán –además de la incluidas en el primer disco– serán presentadas en el recital de este viernes.

La puesta incluye una escenografía especial “con audiovisuales y luces porque que si bien la música es lo más importante, no es lo único. La idea es ampliar los sentidos”.