El escritor rosarino Enrique Gabenara es el nuevo director del Centro Cultural Roberto Fontanarrosa. El funcionario asumió el cargo en la segunda gestión de Pablo Javkin al frente de la intendencia de Rosario, tras la gestión de Rafael Ielpi. En diálogo con Rosario3,  adelantó los cambios que se vienen para el espacio ubicado en la Plaza Montenegro, que se inscriben en la revitalización del casco histórico de la ciudad.

—¿Cómo fue tu recorrido en la gestión cultural pública, antes de llegar al Fontanarrosa?
—Yo vengo trabajando desde hace 16 años en el Ministerio de Cultura de la Provincia. Ahí ocupe el cargo de la Jefatura de Programación y Producción hasta este momento. Hicimos una variedad de programas, entre ellos, Hoy en mi barrio y la vinculación con el plan Nueva oportunidad. Desde ya que estoy agradecido por la convocatoria del secretario de Cultura, Federico Valentini.

–¿Podés adelantarnos algunas de los cambios proyectados junto al secretario de Cultura para el Fontanarrosa?
—En principio, la idea es reconvertirlo y darle la puesta en valor dentro del territorio del casco céntrico. Al igual que con el Complejo Astronómico Municipal, se propone una mirada estratégica, tanto por el recorrido, uno en el Parque Urquiza y otro, en plena peatonal San Martín, como por el hecho de que son edificios con mucha historia y con mucho potencial. Son lugares para volver a ser habitados por el ciudadano, más en este momento extraño y difícil. Me parece que es una apuesta importante y políticamente significativa. El Fontanarrosa viene de una gestión de Rafael Ielpi, vinculado durante muchos años a sectores de la plástica, de la escritura; un sinfín de congresos que se hacían acá, que vinculaban al Fontanarrosa con otras instituciones. Em esta etapa, estamos apuntando a resignificarlo en un sentido cultural, por eso hemos cambiado un poco lo de Centro Cultural Roberto Fontanarrosa y ahora le estamos imprimiendo el sello de Cultural Fontanarrosa, inclusive para que tenga un anclaje en las nuevas generaciones, en las generaciones que no conocieron al Negro (Roberto Fontanarrosa).

—¿Cuál es el perfil que tienen en mente?
—El perfil que estamos buscando, con las primeras actividades, es el de jóvenes y preadolescentes. Estamos apuntando a que este espacio empiece a vincularse con ese grupo etario, con ese recorte que le queremos dar para poder ponerlo en diálogo con esta comunidad y con el edificio. Hay un sinfín de lugares, de espacios enormes donde poder desarrollar activadas y demás. Queremos darle esa impronta de espacio joven, amable, que los contenga y que ellos puedan producir sus actividades. Nosotros queremos acompañar en ese sentido y dialogar, obviamente, con el afuera, con las actividades que suceden en lo cotidiano, como el Mercado del Centro, la Asociación Peatonal San Martín.

—¿Un nuevo nombre para el 2024 del Centro Cultural Roberto Fontanarrosa?
—Sí, Cultural Fontanarrosa o El Fontanarrosa, algo que sea mucho más amable y significativo para poder nombrarlo, que el ciudadano se empiece a apropiar del espacio y entienda que estos espacios públicos, espacios del Estado municipal, son lugares de plena accesibilidad.

–¿De qué manera se suma a la transformación la Universidad Nacional de Rosario.
–En este período de cambio y reestructuración, la UNR entra como otro protagonista más dentro de las reformas que se van a hacer y de la programática que se va a trabajar; todo apuntado a la recuperación al casco céntrico que es lo que está impulsando el intendente (Pablo) Javkin. En esa recuperación del centro de la ciudad, entra el Fontanarrosa.

Con el Ciclo Shippear en este enero, el Cultural Fontanarrosa dio el puntapié inicial para su programación 2024. Una propuesta que incluye recitales en diversos formatos en la pérgola de la Plaza Montenegro y que se extenderá durante febrero.