En este comienzo del sexto mes del año, Rosario amaneció en medio de un típico día de otoño, rumbeando hacia el invierno. El cielo estaba completamente cubierto, la humedad dominaba todo y comenzaba a caer una lluvia débil, pero lluvia al fin. Lo alentador es que el pronóstico indica que mejorará hacia el domingo.

En las primeras horas de este sábado, el cielo estaba completamente cubierto sobre Rosario y la región, con precipitaciones en varios sectores de la ciudad y de la zona.

La temperatura no era tan baja: 12.4 grados. Y se esperaba una máxima de 21.

La humedad era del 95 por ciento y el viento soplaba del sur a 5 kilómetros por hora.

El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) anticipa que por la tarde el cielo estará parcialmente nublado, pero sin lluvias.

Para el domingo adelantan cielo parcialmente nublado, con temperaturas que irán de los 9 a los 21 grados.