Un taxista fue detenido este domingo en pleno centro de Rosario luego de ser visto realizando maniobras de conducción peligrosas. Se constató que estaba totalmente borracho.

Según información confirmada por la Secretaría de Control municipal, que intervino para testear al conductor, el control de alcoholemia dio 2,66 gramos por litro de sangre. El hombre fue demorado y el vehículo, remitido al corralón.

La cantidad de alcohol detectado es cuatro veces más que la permitida para automovilistas particulares (0,5), mientras que para conductores de transporte público de pasajeros, como taxis, colectivos y remises, la tolerancia es cero, por lo que al responsable le cabrán sanciones extra.

Agentes municipales intervinieron ante la denuncia de que un chofer profesional conducía de manera peligrosa por la zona de San Juan y Buenos Aires, pleno casco céntrico rosarino. Estacionó en cortada Ricardone y allí fue intervenido.