Un grupo de investigadores del Conicet y la Universidad Nacional de Rosario (UNR) mostraron su preocupación por el protocolo provincial para la vuelta a clases. Según señalaron, en el documento no se tiene en cuenta el principal medio de contagio del coronavirus y tampoco se menciona la necesidad de ventilación permanente. 

En una carta que enviaron a la ministra Cantero, explican que actualmente existe evidencia “concluyente sobre el rol predominante de los aerosoles en la transmisión del coronavirus, sugiriendo que al menos el 80% de los contagios tienen lugar por esta vía”.

“Los aerosoles son gotitas microscópicas que se emiten al respirar, al hablar, al toser, y que por su pequeño tamaño tienen la capacidad de permanecer suspendidas en el aire durante varios minutos e incluso horas. El contagio por esta vía se da cuando una persona inhala aerosoles exhalados por una persona infectada”, indicaron.

Para los especialistas, estos últimos estudios no se tuvieron en cuenta a la hora de trabajar los protocolos sanitarios, pero sí se tomó en consideración la posibilidad de que el virus se transmita por superficies contaminadas. “Hoy en día, dichos mecanismos de contagio si bien no se descartan, serían mucho menos frecuentes”.

“En este sentido, la orden que están dando a las escuelas de aumentar el tiempo de permanencia en recintos a 90 minutos, va en contra de la principal recomendación para prevenir el contagio y pone en serio riesgo a docentes y alumnos, al forzarlos a estar en un sitio donde probablemente se acumulen aerosoles”, detallaron los investigadores.

Ante esto, recomendaron que el cursado continuo no supere los 45 minutos y se cambie el tiempo de descanso de media hora por recreos más cortos de 10 minutos. “Para garantizar la correcta ventilación y dispersión de aerosoles en los interiores, disminuyendo así el riesgo
de contagio”.

“Solicitamos a las autoridades del Ministerio de Educación rever de manera urgente esta decisión que pone en riesgo de manera completamente innecesaria a docentes, asistentes escolares, alumnos y familias y que puede hacer peligrar en poco tiempo la continuidad de las clases presenciales”, concluye el escrito.