Con goles de Zampedri y Camacho, uno en cada tiempo, Rosario Central se impuso 2-1 ante Estudiantes. Con este resultado de la fecha 13, el canalla rompe la racha de ocho partidos sin ganar en la Superliga.

Si bien este torneo no es hoy su prioridad por la inminente final de la Copa Argentina, el triunfo era vital para salir de los últimos puestos y llegar con confianza al juego decisivo de este semestre (del 6 de diciembre).

A los 13 minutos del primer tiempo, Fernando Zampedri marcó el 1-0 parcial tras una buena acción de Bettini que robó una pelota en ataque y sacó un centro preciso.

A los 41 minutos, fue expulsado Iván Gómez en el Pincha. El árbitro Pablo Echavarría le mostró la segunda tarjeta amarilla al volante y la visita se quedó con diez jugadores.

En el complemento, Central controló el partido y con otro buen centro -esta vez de Parot- aumentó la diferencia. Camacho, de cabeza, fue el autor del 2-0.

Parecía que el final iba a ser todo del local, con la diferencia en el marcador y el hombre de más. Pero se equivocó Elías Gómez atrás y Albertengo marcó el descuento a los 40.

El Pincha, que había hecho muy poco, se agrandó y fue por el empate. Al canalla le pasó todo lo contrario y por eso sufrió los últimos minutos.

Pero Estudiantes verificó su mediocridad en ofensiva (anda por la mitad de la tabla con 16 puntos) y el duelo finalizó 2-1.

Central ganó y dejó varias buenas noticias en la noche del Gigante. La primera -claro- el resultado que necesitaba para levantar en la Superliga.

Los canallas debían mejorar su posición en la tabla (estaba 19º con 12 unidades y se fue a 15) y empezar a engrosar su promedio de cara al torneo que viene. Además, llevaba ocho fechas sin ganar (tomando la Copa Argentina, había ganado sólo uno de los últimos 12 partidos que jugó).

La otra buena noticia fue que mostró un buen funcionamiento y mereció el triunfo (bien Gil en lugar de Ortigoza, Camacho desde los costados y Zampedri en el área). Fue uno de los mejores partidos de la era Bauza y eso es un activo para planificar lo que viene.