El Ministerio de Trabajo de Santa Fe dictó este mediodía conciliación obligatoria al conflicto sindical en los puertos cerealeros del norte del Gran Rosario y finalmente la actividad es normal en las terminales aceiteras.

El sindicato aceitero de San Lorenzo había iniciado este viernes al mediodía un paro de 24 horas en las plantas del norte del Gran Rosario en protesta por el conflicto en la empresa Buyatti. 

La huelga, con impacto en las plantas de San Lorenzo, Timbúes y Puerto General San Martín, se tomó en solidaridad por la represión sufrida por los trabajadores de Buyatti por la policía este jueves y complica seriamente la logística y la actividad industrial y portuaria justo en plena cosecha gruesa con miles de camiones llegando a los puertos de la región.

Estamos recorriendo las empresas para activar el paro en todas las plantas. Avisamos al Ministerio de Trabajo, y es probable que las empresas busquen sacar cuanto antes una conciliación obligatoria”, dijo el titular del sindicato, Pablo Reguera, en diálogo con el Pregón de San Lorenzo. Efectivametne, pasado el mediodía llegó la conciliación obligatoria.

Sobre las versiones, alentadas desde las empresas, de que había una dura interna en el gremio, Reguera negó una fractura. “Ocurre que ayer había delegados en plantas de Timbúes que no estaban al tanto de lo ocurrido y opinaba distinto. Fue un problema de comunicación. Por eso, se hizo una asamblea en la que todos compartieron la información y se decidió el paro en respaldo a los compañeros de Buyatti”, completó el secretario del gremio aceitero.

El conflicto

Según denunciaron a la prensa los empleados, la semana pasada en Reconquista, adonde tiene sede social el grupo, la empresa firmó con el gremio aceitero (Soea) los términos de la desvinculación del personal.

Pero al ir a firmar los acuerdos particulares al Ministerio de Trabajo, los empleados se encontraron que las cifras de las indemnizaciones eran hasta 50% menores a las acordadas. En concreto, les incluían en el monto todas las deudas pendientes y no sólo las indemnizaciones, como había sido el acuerdo firmado en Reconquista.

Frente al incumplimiento, los empleados se concentraron este jueves a la mañana frente a la planta de la empresa con miras a armar un piquete que bloquearía el paso de camiones a otras plantas de la zona, como las de Bunge y ADM. Pero, según denunciaron los empleados, llegaron 30 policías en 10 móviles con la orden de reprimir y evitar el bloqueo.